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Un juez de EE.UU. obliga a Google a entregar emails de extranjeros al FBI
Un juez de Estados Unidos ha ordenado a Google entregar emails de usuarios extranjeros al FBI para cumplir con una orden de registro relacionada con una investigación sobre un fraude cometido en el mismo país nortamericano.
La reciente sentencia ha sido noticia debido a que va en contra de lo dictaminado por otro juez el año pasado, relacionado con un caso en el que Microsoft se negó a entregar los datos almacenados en servidores ubicados fuera de Estados Unidos (concretamente en Irlanda), siendo la causa ganada por la compañía.
Sin embargo, en el caso de Google, el Juez Magistrado Thomas Rueter dictaminó el pasado viernes que el acto de transferir emails procedentes de servidores extranjeros no puede ser calificada como incautación, argumentando que no hay una “interferencia significativa” con el “interés posesorio” del titular de la cuenta, afirmando además que cualquier infracción de privacidad ocurre “en el momento de su divulgación en Estados Unidos”, en lugar de tomar como referencia cuándo datos fueron transferidos.
El equipo legal de Google habría intentado utilizar la sentencia del caso de Microsoft como precedente contra la orden de registro. El gigante de Mountain View ya había colaborado con la justifica estadounidense en otras ocasiones, aunque solo entregando datos almacenados en Estados Unidos. Viendo el resultado tan poco favorable, Google apelará argumentando que “el magistrado se ha apartado del precedente en este caso”, dejando bien claro que seguirán repeliendo las órdenes de registro contra servidores ubicados en el extranjero mientras puedan.
Tanto el caso de Microsoft como el de Google involucran órdenes emitidas bajo una ley federal de 1986 llamada Ley de Almacenamiento de Comunicaciones, la cual recibe muchas críticas debido a que está anticuada y no se ajusta a los tiempos ni la tecnología actuales. Centrándonos en el caso de Microsoft, el juez que emitió la sentencia definitiva argumentó la necesidad de revisar las normativas en torno a la privacidad para ofrecer una respuesta más global.
Esta situación deja dos posibilidades abiertas para limitar la jurisdicción sobre las comunicaciones almacenadas en el extranjero. Que el Congreso de Estados Unidos revise la legislación para ofrecer un panorama más claro ante estas situaciones o bien se puede esperar a la sentencia definitiva de la Corte Suprema.
El Congreso de Estados Unidos aprobó el año pasado un controvertido cambio de ley de la Corte Suprema que expande los poderes del FBI para buscar datos, pudiendo un juez emitir ordenes de búsqueda incluso fuera de su distrito. Esto abre la puerta al acceso remoto para el FBI a dispositivos que se encuentran físicamente fuera de su jurisdicción e incluso en el extranjero.
A pesar de que Microsoft consiguió ganar su batalla, la reciente sentencia contra Google (que será apelada) y la ley aprobada el año pasado han dejado preocupados a los defensores de la privacidad.
Fuente | TechCrunch