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Twitter vendió acceso a sus datos a un investigador de Cambridge Analytica

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Twitter vendió acceso a los datos a un investigador de Cambridge Analytica

Twitter vendió acceso a los datos a un investigador de Cambridge Analytica

El escándalo de Cambridge Analytica ha centrado toda la atención en Facebook, hasta el extremo de que Mark Zuckerberg ha tenido que dar explicaciones personalmente ante el congreso estadounidense y pedir disculpas al reconocer que desde la compañía no hicieron lo suficiente para proteger los datos de sus usuarios.

Sin embargo, aunque la situación ha terminado siendo una especie de “linchamiento” contra Facebook, con fuertes caídas en bolsa, hay que tener en cuenta que no es la única red social con repercusión mundial, por lo que los tentáculos de Cambridge Analytica podrían haber abarcado otras plataformas. Según informan desde Bloomberg, Twitter vendió acceso a los datos a un investigador vinculado a Cambridge Analytica. Esa persona fue Aleksandr Kogan, quien construyó, mediante su propia empresa, Global Science Research (GSR), la aplicación que sirvió para hacerse con los datos de los usuarios de Facebook y luego hacer campaña en favor de Trump y el Brexit.

Ha sido la misma Twitter la que ha salido al paso para explicar los hechos. “En 2015, GSR tuvo acceso una sola vez mediante la API a una muestra aleatoria de tweets públicos correspondientes a un periodo de cinco meses comprendido entre diciembre de 2014 y abril de 2015. Tomando la base de los informes recientes, llevamos a cabo nuestra propia revisión interna y no encontramos ningún acceso a datos privados sobre personas que usaban Twitter.”

Tras conocerse el caso de Facebook, Twitter decidió romper sus vínculos con Cambridge Analytica y GSR. Por otro lado, los datos obtenidos por Aleksandr Kogan no tendrían que ser de gran utilidad, ya que la red social de microblogging no comparte mucha más información aparte de lo publicado en los propios tweets, además de que GSR no parece que haya atravesado las líneas que sí se atrevió a cruzar con Facebook.

Con estos datos sobre la mesa, no tiene pinta que estemos ante un gran escándalo a nivel de privacidad, pero viendo cómo se pueden terminar retorciendo las cosas, siempre es mejor estar pendientes y preparados para lo peor.

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